CONFIDENCIAL
El runrún: Un vídeo que ha causado más de un dolor de cabeza
Es complicado esto de las redes sociales. Y peligroso, como a estas alturas de la película ha comprobado en sus carnes más de uno. Finalmente no ha llegado la sangre al río, pero sí que se ha tenido que intervenir de manera oficial tras el vídeo, viralizado, en el que salía un alto cargo de la Junta.

El río revuelto en Izquierda Unida. Aunque parezca que queda mucho, tampoco es demasiado lo que falta para que estemos de nuevo en época pre-electoral y los distintos partidos están comenzando a organizarse. La fragmentación del espacio político es una realidad, y veremos a ver si de aquí a la próxima cita electoral la misma no ha aumentado aún más. En este sentido cabe mirar especialmente a IU Andalucía, donde ‘amigos’ y ‘críticos’ de Podemos batallan en el seno del propio partido para ver quién se lleva el gato al agua sobre una posible confluencia –y veremos a ver cómo queda el patio después…-. En esta batalla puede volver a tener especial relevancia un onubense: el exvicepresidente de la Junta y exalcalde de Bollullos, entre otros cargos. Efectivamente, Diego Valderas, en torno al cual al parecer se estarían alineando los críticos frente a Maíllo, que tiende más hacia una suerte de alianza con Podemos Andalucía. Se avecinas turbulencias por lo que parece de cara a la próxima asamblea de la formación. Y puede que las mismas tengan protagonismo onubense.
Nuevas botas para Anita. Les fueron sustraídas en mayo tras el partido que disputó el Sporting Huelva ante el Fundación Albacete Nexus, y lo cierto es que la jugadora del equipo onubense se llevó un disgusto considerable. La historia de Anita ocupó entonces varios espacios en los medios, y desde estos ha llegado nada menos que a Juan Mata, internacional con la Selección y actualmente jugador del Manchester United, que al enterarse no dudó en llamar a la futbolista, sino que además le ha querido regalar unas botas nuevas. Y Anita como chica con zapatos nuevos que anda por ahí ahora, ¡claro que sí! Al menos, el disgusto inicial se ha tornado en algo positivo al final.
