CONFIDENCIAL
El runrún: La Apple Store huelvana
Ayer comentábamos en esta misma sección que la tienda especializada en los productos de la manzana mordida se mudaba a la Placeta. Hoy les contamos que lo harán a lo grande, ocupando uno de los principales locales de la zona.

Se trata de la segunda mudanza que emprenden desde que se establecieron en la calle Béjar de la capital hace aproximadamente una década y una apuesta aún mayor que la que hicieron cuando en 2013 se trasladaron a la principal calle comercial de la ciudad, concretamente al número 9 de la calle Palacio. Como decíamos, no es cualquier local el que ocupará Rossellimac en La Placeta, sino uno de los más grandes, el que se encuentra en los bajos del edificio Torrecolón, junto a Zara, con fachada a la calle Plus Ultra y la calle Bocas. Hasta hace poco estaba ocupado por Perfumerías Súper y allí estuvo antes Prenatal. Se trata de un inmueble con más de 170 metros cuadrados de superficie, con dos plantas y sótano, que desde finales de este mismo mes de septiembre o principios de octubre se destinarán a mostrar todos los productos y accesorios tecnológicos de la icónica firma californiana. No, no será una Apple Store, ya que estos son establecimientos gestionados directamente por la empresa americana y Rossellimac es lo que se denomina un ‘Premium reseller’, o lo que es lo mismo, un distribuidor oficial de la marca que tiene autorización de Apple, por ejemplo, para reparar sus productos, además de para venderlos. Según hemos podido saber, el nuevo establecimiento tomará prestado otra característica de las Apple Store, como es el contar con un espacio –en este caso la segunda planta– para formación, es decir, para enseñar a los usuarios a desenvolverse con sus iPhones, iPads o Macbooks. Un ambicioso proyecto, como vemos, con el que estarán encantados los ‘fanboys’ onubenses de la marca de la manzana.
Falsa acusación de listeriosis en Almonte. Los casos de listeriosis, que tantos afectados se han registrado en España, especialmente en Andalucía, ha provocado un torrente incontrolable de rumores y comentarios poco rigurosos, junto a la información real y contrastada pese a la confusión. En este clima hay quien aprovecha para hacer bromas de mal gusto con temas muy serios o quien malévolamente aprovecha para tratar de manchar el nombre de otros. Es lo que le ha ocurrido al Centro de Alimentación Pedro José Momo, de Almonte, que en las redes sociales ha denunciado lo ocurrido.
“Se pone en conocimiento de nuestros clientes que alguien ha gastado una broma de mal gusto haciendo creer que existe un nuevo caso de listeriosis en Almonte por el consumo de carne mechada comprada en nuestro establecimiento”, informó el negocio, que afirmó que esta acción tendrá “sus consecuencias legales, porque ya está en mano de las autoridades competentes”. Aclaran que ellos elaboran “de manera casera y artesanal” la carne mechada que comercializan y subrayaron que “no vendemos el producto que contenía la bacteria y que ha provocado listeriosis entre los consumidores”. Aclarado queda.El sillón de la vergüenza. Se dice que una imagen vale más que mil palabras y aunque no es una verdad absoluta, hay muchos casos en lo que es así. Pónganse en situación. Imagínense que tiene que pasar la noche en el hospital porque un familiar está enfermo e ingresado allí. Dentro que por el motivo y por el lugar conciliar el sueño va a ser complicado, al menos uno espera que ciertos detalles no fallen. Y claro, pasar la noche en un sillón muy deteriorado es una faena.
Una persona en esta situación lo compartía en las redes sociales y abría la veda de muchísimos comentarios. “Estos son los sillones dónde los familiares tenemos que pasar la noche, de vergüenza. Hospital Juan Ramón Jiménez (Huelva). Ganas de coger el sillón y tirarlo x la ventana. Me cago en to…”, expresaba en el grupo de Facebook Huelva por una sanidad digna. Las respuestas repetían un mensaje: “qué vergüenza”. También hay quien decía que “los de las cárceles y los centros de refugiados están divinos”. Esperemos que se tome nota y sobre todo que el familiar de quien denucia la situación esté pronto en casa en buenas condiciones.