CONFIDENCIAL
El runrún: García-Palacios, lecciones de periodismo
Mucho se ha escrito (y cuestionado, por supuesto) sobre las comparecencias vía plasma de dirigentes políticos de primera línea –recuérdese al ex presidente del Gobierno, Mariano Rajoy– y aquellas otras en las que se convoca advirtiendo de antemano que no se admitirán preguntas.

Recordemos también que el actual Gobierno tuvo que cambiar el formato de sus intervenciones en el primer estado de alarma. La misma Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE) ha llegado en algún momento a barajar la posibilidad de llamar a la puerta del Tribunal Constitucional (TC) –cuando hay base– por las ruedas de prensa sin preguntas. Aclaremos, antes que nada, que una rueda de prensa no es tal si no hay preguntas y que, de convocarse con esta excusa, los comparecientes no son más que bustos parlantes y que a los asesores/gabinetes de comunicación que optan por este formato, les saldría mejor solventar el asunto con una nota, un archivo de audio y un vídeo con el mensaje que se quiere lanzar (en el argot, un 'total'). De hecho, los profesionales con criterio suelen hacerlo cuando consideran que el asunto no llega para una rueda. Ni pierden el tiempo ni lo hacen perder a los periodistas.
Traemos a este runrún la polémica en torno a las ruedas de prensa (o la falta de conocimiento de lo que es) por una situación que se ha producido en Huelva, concretamente en la sede de la Federación Onubense de Empresarios (FOE), en una convocatoria con motivo de la movilización del 20M en Madrid en defensa de la agricultura con el presidente de Asaja, José Luis García-Palacios, al frente. Ante una pregunta digamos incómoda (pueden escuchar la secuencia en el audio adjunto), el presidente de los empresarios acabó su alocución diciendo que no admitía preguntas que no estuvieran relacionadas con la convocatoria. Error. Es obligación del presidente de los empresarios y le asiste todo su derecho a defender al sector al que representa. Hay un pero en el formato elegido para su comparecencia: las ruedas de prensa (el mismo concepto lo indica) son abiertas en tiempo y temática y acaban cuando los periodistas lo consideren (no antes) porque no tienen más temas o cuestiones que plantear. Vaya por delante que del mismo modo que el periodista tiene derecho a preguntar lo que estime según su criterio profesional, el compareciente tiene el derecho a no contestar pero no a vetar temas.
Una administración sin corazón. Con la inminente retirada de la obligatoriedad de llevar mascarilla en interiores y cuando hemos cumplido ya dos años desde el primer estado de alarma, resulta inconcebible que la Administración, en este caso una dependiente del Gobierno central, la Seguridad Social, tenga tan poca sensibilidad hacia los ciudadanos.

La imagen habla por sí sola. Hace unos días a las puertas de la sede de la oficina que se dedica a gestionar las incapacidades laborales, en la calle Rico, una persona esperaba su turno en una silla de ruedas mientras otra trataba de protegerla de la intensa lluvia que aquella mañana caía sobre la capital. Y es que en este organismo oficial no consideran oportuno suavizar las normas que impusieron cuando la pandemia se encontraba en su punto álgido. Desde entonces, sólo permiten entrar en el edificio al que le toque su turno; el resto, a la calle. Y ni siquiera una situación tan penosa como esta que describimos parece ‘ablandarles’ el corazón. No sólo a quien dicta las normas desde algún despacho, sino a los propios funcionarios, que ese día podrían haber tenido el gesto humanitario de permitir entrar a las cuatro personas que esperaban fuera bajo el chaparrón. Seguro que nadie les hubiera despedido por ello.
La retratista del presidente. Siempre es bonito y gratificante que reconozcan tu valía, sea en el ámbito personal o profesional. La artista onubense Isabel Castilla ha compartido en sus redes sociales su alegría por el contacto que ha mantenido con el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla. La pintora le envió un retrato de una gran calidad al presidente andaluz y este se lo agradeció con una cariñosa carta. Ella compartió “el reconocimiento de mi valor como artista de parte del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, con motivo del retrato que le he realizado es una gran alegría para mí y quiero compartirlo con todos vosotros”. Por su parte, el presidente andaluz quiso “a través de estas líneas me gustaría hacerte llegar mi más profundo agradecimiento por el fantástico retrato con el que me has obsequiado, una muestra de tu capacidad para captar la esencia y el alma de las personas, plasmándolo sobre el lienzo con un gusto y una mezcla exquisita de colores. Valoro muy sinceramente tu trabajo artístico y la deferencia que has tenido haciéndome llegar tu obra, expresión de generosidad y talento”. Además comentó que “Como presidente del Gobierno de Andalucía me enorgullezco de los artistas andaluces que, como tú, lleváis con vuestra dedicación, ingenio y valía el arte de Andalucía más allá de nuestras fronteras”. Desde aquí felicitamos a Isabel por su obra y a Moreno Bonilla por responder con unas palabras a la altura del talento de la artista.
