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El runrún: Los socialistas visten de Primark
La fiebre del Holea no ha afectado sólo al onubense de a pie. No se crean que son solo ustedes o sus vecinos los que estos días se lanzan a la carrera para pillar un aparcamiento en el centro comercial, los que soportan colas y aglomeraciones para disfrutar de la nueva superficie. También nuestros ‘ilustres’ lo hacen.
Que le pregunten si no a la diputada socialista, María José Rodríguez, que el jueves pasado sedejaba ver por Primark como una ‘currita’ más, sorteando a la multitud ybicheando entre los ‘montones’ para encontrar las mejores ofertas. No lo hacíasola, no; la acompañaba su pareja, el parlamentario también socialista -¿seimaginan que fuera del PP? Cualquiera aguanta las broncas a la hora de comer…- José Juan Díaz Trillo, igual deinteresado que ella en las gangas de la firma irlandesa. Ambos se mimetizabanentre todos esos onubenses que buscaban los mejores precios en la tiendarecientemente instalada en la capital onubense, aunque probablemente la mayoríade ellos contaran con un presupuestoalgo más ajustado que el de Rodríguez y Díaz Trillo. Una pareja que, sinembargo, optó igualmente por esta económica firma para renovar parte de suvestuario. Y es que puede que el diablo vista de Prada, pero los socialistasvisten de Primark.
¿Una candidata en ciernes? No abandonamos a la familia socialista, aunque en este caso para interesarnos por un asunto bien distinto. En alguna otra ocasión hemos traído a estas mismas líneas los comentarios que van surgiendo en torno a los posibles candidatos a las próximas elecciones a la Alcaldía de la capital. Con dos de los tres contendientes decididos —salvo sorpresa, ‘Perico' Rodri por el PP y Pedro Jiménez por IU— el único que aún no cuenta con todas las garantías para representar a su partido en los comicios locales es el socialista Gabriel Cruz. Ya dijo Mario Jiménez en enero que, a pesar de su «magnífica» labor al frente del PSOE capitalino, sería la militancia la encargada de elegir al candidato a disputar a Pedro Rodríguez el trono consistorial. Y también el secretario provincial del partido, Ignacio Caraballo, subrayó por esas fechas la «cercanía» de Cruz y su buena «conexión» tanto con los militantes como con los simpatizantes», aunque, como su cuñado Jiménez, dejó claro que sería la asamblea local la que tendría la última palabra. Por cierto, también dijo que no iban a «interferir» en el proceso «desde el exterior». El caso es que, a falta de movimientos reales, lo que no suele faltar en circunstancias como ésta son los chismes, los rumores que circulan con mayor o menor fundamento. El último que ha llegado a nuestros oídos es que otra mujer —después de Manuela Parralo y Petronila Guerrero— podría estar llamada a intentar destronar a Pedro Rodríguez. Hablamos de María del Mar Alfaro, ex delegada provincial y viceconsejera andaluza de Cultura y Deporte. Nacida en Sevilla, es licenciada en Derecho y forma parte del Cuerpo Superior de Administradores Generales de la Junta de Andalucía, donde ha desarrollado desde 1988 su carrera profesional. Quizá por este perfil más técnico y menos político, la actual pareja de Javier Barrero es poco conocida por el ciudadano de a pie, un hándicap —el haber pisado poca calle y mucho despacho— que comparte con las dos últimas personas que fracasaron en su asalto a la Alcaldía de la capital, por lo que su posible candidatura no parece demasiado verosímil aunque, ¿quién sabe?
Una camiseta reivindicativa en Lepe. La crisis económica está haciendo estragos y muchas personas lo están pasando muy mal para llegar a fin de mes. Y si no que se lo digan a Julio Rivero Suárez, un trabajador de la construcción de Lepe al que el último empresario para el que prestó sus servicios le ha dejado a deber la nada despreciable cantidad de 80.000 euros. Ante la desesperación de no poder cobrar lo que se le adeuda, Julio ha decidido hacerse una camiseta en la que se puede leer 'JOSE A. RODRIGUEZ. PAGAME LOS 80.000 EUROS QUE ME DEBES'. Este lepero luce su camiseta allá por donde va, con la esperanza de que algún día pueda cobrar ese dinero que con tanto esfuerzo se ganó y que ahora se lo niegan. Desde aquí deseamos toda la suerte del mundo a Julio para que consiga su objetivo. Desde luego lo que sí ha logrado es que en Lepe muchos de sus vecinos se hayan enterado de su situación, algo que no sabemos si a José A. Rodríguez le habrá hecho excesiva gracia.
