sexología
Sexualidad y autismo
Con motivo de la celebración del Día Mundial del Autismo, el domingo 2 de abril, rescatamos de la hemeroteca uno de nuestros artículos para hacer hincapié en la importancia que tiene la formación en materia sexual de todas las personas con autismo, así como de sus educadores, profesores y familia.

Resaltar también que es Huelva, nuestra ciudad, la primera de España que está poniendo pictogramas por toda Huelva con objeto de que estas personas conozcan el su ciudad y todo lo que ella les ofrece.
Hasta hace algunos años, y en muchos casos incluso hoy día, hablar de sexualidad más allá de hombres y mujeres sin patologías y/o alteraciones psíquicas ha sido poco frecuente y cuando menos un ardua tarea.
Por suerte, en los últimos años la despatologización y la tendencia a la normalización de la vida de personas con trastornos de diferente índole nos lleva a ocuparnos de la sexualidad de estas personas como un área más de sus vidas de la que tienen derecho a disfrutar.
Si ya de por sí para muchos papás y mamás es difícil afrontar la crianza y educación de sus pequeños, cuando éstos nacen con un trastorno del espectro del autismo, la cuestión se les puede hacer más difícil. Al principio pueden estar perdidos, temerosos, llenos de dudas, etc. sobre cómo pueden ayudar a sus hijos a conseguir un buen nivel de autonomía. Para ello es bueno pedir ayuda a profesionales con formación en trastornos del espectro autista y/o a asociaciones especialistas en el tema, esta es una muy buena herramienta para aprender cómo deben ayudar a sus pequeños en su proceso de desarrollo. Por otro lado, el trabajo de profesionales con los niños con autismo es fundamental para que adquirieran un nivel de autonomía, establezcan relaciones con su entorno, para manifestar conductas afectivas, conocer las normas, adquirir rutinas, etc.

Las personas con autismo presentan ciertas dificultades en la expresión y gestión de sus emociones (pero no quiere decir esto que no puedan conseguirlo), en el establecimiento de contactos sociales y con el entorno, en la comprensión de normas y límites, en la comunicación, etc. Si tenemos en cuenta que la sexualidad, tal como hemos explicado ya en muchos artículos publicados anteriormente, es mucho más que la genitalidad, ya que es un todo que engloba la expresión y recepción de afectos, la expresión de sus deseos y necesidades, el tacto, la comunicación, etc., entenderemos la dificultad con la que nos podemos encontrar para educarles sexualmente, pero no podemos quedarnos en esa dificultad, sino adaptar esta educación sexual a las necesidades de las personas con autismo. ¡Ellos también tienen sus derechos sexuales!
¿Qué contenidos debemos trabajar?Teniendo en cuenta, tal como decíamos anteriormente, la necesidad de trabajar con las personas con autismo para que adquieran un nivel de autonomía que les permita desenvolverse en su entorno familiar, social, etc. debemos ir incorporando información sobre la sexualidad desde edades tempranas adaptando los contenidos según la edad y necesidad de estas personas. Entre ellos cabe destacar:

En definitiva, es importante que al educar sexualmente a personas con autismo el objetivo sea que sus comportamientos sexuales se ajusten a la capacidad de cada individuo, que puedan discernir entre lo que desean y lo que no, dar y recibir afectos, atender a sus deseos, etc. y disfrutar así de una vida sexual sana y satisfactoria. Padres y madres deben ser partícipes también de esta educación.
El uso de fotografías y pictogramas pueden ser de gran ayuda en este proceso educativo.
Y recuerda que disfrutar del sexo es una decisión y un derecho de todas las personas.
Carmen CanterlaPsicóloga SexólogaDirectora del I.S. Vidacer Huelva.NICA 44915
C/La Palma, 10 Local Bajo. Huelva. Tlf: 959 54 40 11