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'O Palhaço'
El director brasileño Selton Mello realiza este retrato tragicómico en el que se reserva también el papel protagonista, sobre un joven que vive y trabaja como payaso en el circo de su padre, otro payaso veterano. Cansado todo, duda del sentido de su vida y entra en una crisis de identidad que le lleva a cuestionarse su presente y ansiar otro futuro.

En efecto, el joven Benjamín, se encuentra hastiado de su vida y el circo se le ha transformado en un ambiente opresivo, su nariz de payaso no le deja ya respirar. En él se reflejan todo el espíritu decadente, el desarraigo y la frustración de un mundo tan difícil. A partir de hablar con la joven Ana, después de una actuación, decide que quiere cambiar de vida, tener papeles, casa y pareja, y decide que quiere ir a buscarla al lejano pueblo donde ella viva.A lo largo de la cinta, veremos que nos es tan fácil conseguir esos sueños que nos proponemos y, muchas veces, tenemos que posponerlos o cuando los alcanzamos no son cómo esperábamos.Sin embargo, esta historia intimista y llena de metáforas (como la continua obsesión de Benjamín por tener un ventilador) consigue con paso suave pero firme ir desgranando pequeños momentos gran sensibilidad y otros de inteligente comicidad (encantadora la escena de la comida en casa del alcalde o la de la comisaría) y también optimismo: en el circo no todo está perdido y a través de la recurrente mirada de la niña, Gillerminha (Larissa Manoela) se observa esa otra vertiente dulce y emocionante de este oficio, que aún transmite ilusión.De esta forma, el viaje de este destartalado circo nos sumerge en el Brasil profundo, ese tan alejado geográfica y socialmente de la tópica imagen que tenemos aquí de este país (Copacabana, Natal…). La fotografía y el diseño de producción juegan un papel importantísimo dentro de la historia, contribuyendo notablemente al empaque del conjunto. No podemos decir menos de la música que firma Plinio Profeta, empleando instrumentos clásicos del circo como el acordeón o la trompeta.Los secundarios están bien y Mello consigue gran complicidad entre los dos personajes centrales (padre e hijo), con una gran respuesta por parte del veterano Paulo José.
