la policía tuvo que pedir refuerzos
Detenido un cura en La Orden por atentado y resistencia a la autoridad
12.28 h. Agentes de la Policía Local de Huelva han detenido en la barriada de la Orden a dos personas de nacionalidad ucraniana, padre e hijo, por resistencia y atentado a los agentes de la autoridad, que sufrieron patadas y puñetazos cuando procedían a retirar un vehículo mal estacionado. Uno de ellos, que incluso se autolesionó dándose cabezazos contra el suelo y mordiendo el capó del coche patrulla, resultó ser un sacerdote católico que imparte misa por el rito bizantino en la iglesia de San Pedro.
Los hechos han ocurrido en la avenida de la Orden cruce con la calle Legión Española, cuando dos agentes de la Policía Local que habían denunciado dos vehículos por encontrarse mal estacionados y obstaculizando el trafico fueron recriminados e insultados por el titular de uno de los vehículos. Ante estos hechos los agentes solicitaron la documentación a esta persona quien salió corriendo perdiéndose entre las calles adyacentes.
Transcurridos unos minutos, mientras los operarios de la grúa municipal se encontraban realizando las labores de enganche, apareció nuevamente el conductor agrediendo sin mediar palabra a uno de los Policías que se encontraba de espaldas junto a su coche y procediendo a continuación a meterse dentro del vehículo con intención de emprender la huida con el turismo.
Al reaccionar los agentes y aproximarse al conductor fueron recibidos con patadas y puñetazos teniendo que pedir apoyo a otra patrulla, personándose en lugar poco tiempo después, pero no solo los agentes sino también un segundo individuo que sin mediar palabras comenzó a pegar puñetazos a los municipales que acaban de llegar, al tiempo que intentaba impedir la detención del conductor, que resultaba ser su padre.
Ante lo incontrolable de la situación los agentes solicitan la presencia de apoyo policial, ya que el conductor comienza a realizar una conducta autolesiva con cabezazos contra el suelo y a morder el capó del coche llegando incluso a clavar los dientes en la chapa.
Los Agentes de Policía tuvieron dificultades incluso para poder colocar los grilletes al conductor del vehículo ya que por su corpulencia física la longitud de los grilletes no daba de si teniendo que emplear dos grilletes encadenados para poder abarcar la distancia de una muñeca a otra.
La sorpresa fue mayúscula cuando tras comprobar la identidad del conductor detenido, resultaba ser un sacerdote ucraniano católico que imparte misa por el rito bizantino en la Parroquia Mayor de San Pedro.
