crítica
Al paraíso de Manolo Simón
Después de escuchar el último trabajo, 'Al paraíso', de Manolo Simón, el veterano y excelente cantaor jerezano, con el que tuve el placer de compartir varias reuniones y excelentes momentos en los comienzos de la Peña Flamenca de Huelva, siendo entonces Manolo muy joven, no quisiera dejar pasar esta ocasión para hacer un pequeño comentario del mismo, que me ha parecido extraordinariamente bueno y completo, con 18 temas distintos y variados.

Comienza con unos cuplés por bulerías, vistosos y muy flamencos; alegrías a compás y con gusto; cantiñas, romeras y mirabras, con mucha enjundia y el sabor alegre que llevan los cantes gaditanos, recordándonos a nuestro admirado Antonio Castillo 'El Muela', que tanto enseñó a los aficionados de Huelva.

Polos, con majestad y señorío; bulerías, con el estilo, el gusto, el compás y el sabor que suelen llevar los nacidos en jerez; cabales con el sentimiento de los que 'jieren' y emocionan con sus pellizcos a los que escuchan.
También hay hueco para malagueñas de gran belleza en los estilos de La Trini y El Canario; jaleos extremeños, tan flamencos como poco escuchados; seguiryllas, cante gitano por excelencia que nos deslumbra con sus quejidos flamencos; y tangos, los estilos de Jerez y Extremadura, con estilo y sabor.
Casi todos los temas aparecen acompañados por el genial y excelente guitarrista Pascual de Lorca, que pone de manifiesto todo el saber y conocimientos que atesora, demostrando lo importante que es tocar para cantar, que engrandece el trabajo que presentan el cantaor y el tocaor.
Manolo Simón ha sido y aun sigue siendo uno de los cantaores flamencos más completos desde sus comienzos, que sin que la suerte haya sido su aliada, ha cantado de 'bien pa arriba', sobrado de arte y compás. Un estilo y personalidad propia que ha mantenido en su larga trayectoria artística con una maravillosa y flamenca voz llena de melismas, en la que nos trasmite toda la pureza del arte flamenco de los que quedan en la actualidad pocos. Una oportunidad que tenemos que aprovechar para seguir disfrutando de todo el arte que derrocha interpretando sus cantes, por lo que me atrevería a sugerir a las peñas flamencas de capital y provincia que trataran en lo posible de acercar estos cantes hasta nosotros.
