No tiene sentido
Que duro tiene que ser estar dándolo todo a cambio de nada, y que venga tu presunto jefe y se ría en tu cara y en la de todos. El enésimo órdago del dueño del club, en su intención de exprimir al Decano en una supuesta venta, ha sido el de utilizar a una plantilla de trabajadores como arietes en su guerra con el Ayuntamiento. Pablo Comas pretende librarse de toda responsabilidad y a base de cinismo tira la pelota en el tejado del consistorio.
El madrileño sigue concienciado de ir para adelante con su reclamación en base al estadio Nuevo Colombino. En dicha reclamación cuestiona el convenio de transacción aprobado en el año 2003 por el que el Ayuntamiento reconoce la deuda derivada de la inversión y se establece la forma de pago, vía compensación, mediante la atribución de locales comerciales, la cesión de suelo dotacional, y la suscripción de un contrato de arrendamiento sobre el propio estadio, por plazo de veinte años, aunque posteriormente fue ampliado a cuarenta.
Inteligente es, nadie se lo puede negar, ya que es sabedor de la lucha de egos y la batalla política que ocurrió en el Decano y su entorno en los últimos años. Quiere pescar en un río revuelto, ya que para él todo esto es negocio. Ni sentimiento albiazul, ni su añorado pasado onubense.
Pero también es torpe. Enciende la mecha de la crispación, en una reclamación en la que el mismo cae en la trampa. Y es que sorprende cuanto menos que reclame esa deuda histórica del consistorio y no lo hiciera cuando firmó la compra hace casi cuatro años, como así avanzaron en Onda Cero Huelva en su programa ‘Onda Deportiva’.
¿Cómo puedes reclamar algo que tú mismo aceptaste? Comas, como presidente del Decano, dio su conformidad al pliego de condiciones económico-administrativas en la que se regía el contrato de arrendamiento que disfrutaba el Decano sobre el estadio Nuevo Colombino.
Cabe recordar que en fecha 20 de octubre de 2005 se suscribió entre el Ayuntamiento y el Recreativo de Huelva el contrato de arrendamiento del nuevo Estadio Colombino, por un plazo de 20 años a contar desde el 1 de enero de 2002, fijándose un precio anual de 302.785,62 euros más el IVA correspondiente y que el Ayuntamiento declara haber recibido por compensación de la deuda que mantenía con el club, lo cual hace un total de 7.024.626,47 euros. La finalidad del arriendo es el desarrollo de espectáculos deportivos, entrenamientos y demás actividades relacionadas con la práctica del fútbol. A destacar que los gastos de limpieza, mantenimiento del césped y los que se derivasen del mal uso de la instalación serían de cuenta del Recreativo, siendo el resto a cargo del Ayuntamiento, en cuanto propietario de la instalación.
En cuanto a la reclamación del Decano, en el escrito que fue enviado al consistorio se pedía que el club fuera reintegrado del quebrando patrimonial que considera sufrido como consecuencia de la inversión sufragada por dicha Entidad en la ejecución de las obras del estadio Nuevo Colombino, por importe de 1.750 millones de pesetas + IVA (10.517.711’83 euros + IVA).
Todo un órdago que el propio Ayuntamiento se encargó de aclarar. Primero, intentándolo dejar atado por medio de un documento administrativo que no llegó a concretarse, a pesar del requerimiento al club Decano. Pero desde el consistorio guardan una carta bajo la manga. Se trata del escrito del presidente del Decano a fecha del 19 de septiembre del 2012, en el que había dado conformidad al Pliego de Condiciones, aceptándolo y subscribiéndose al mismo.
Así las cosas, no tiene sentido cambiar de baraja cuando cambian los intereses.
No tiene sentido tildar tu gestión de heroica cuando no cumples con los compromisos de pago y pides que sea tu socio el que afronte parte de ellos, el mismo al que pones al pie de los caballos.
No tiene sentido jugar con el sentimiento de una afición para tensar la cuerda en una negociación.
No tiene sentido llegar a Huelva y pasearte por el club para decir que no hay ofertas, cuando no das facilidades.
No tiene sentido pedir 6 millones por un club que supera los 21 millones de euros de deuda, según han informado hoy en Cope Huelva.
No tiene sentido reclamar una deuda histórica que posiblemente otros manejen en el caso de que te la concedan, ya que en todo momento has dicho que quiere dejar al Recreativo y que dimitirías en el final del mes de enero.
El tiempo corre y mientras que las noticias en cuanto a la venta del club siguen sin formalizarse, en el Ayuntamiento se toman las cosas con calma. Yo diría que con demasiada. Este martes habrá reunión de la Junta de Huelva Deporte, para pedirles a los administradores del club Decano la convocatoria de la Junta de Accionistas. Solo eso, nada más. Y mientras tanto hablan de optimismo y de que el Decano no va a desaparecer.
Por su parte los empleados hablan de situación crítica y que habrá movilizaciones si no ven movimientos de verdad, mientras que los futbolistas han tomado su propio camino. De hecho los capitanes se reunirán con miembros de la AFE para solicitar un adelanto o préstamo que ayuden en algunos casos de compañeros. Situaciones dramáticas que no encuentran respuesta en el cinismo e hipocresía de un dueño al que parece que ya todo lo da igual. Nada tiene sentido en el Decano.
