CONFIDENCIAL
El runrún: El alcalde de Moguer, 'aliado' de Vox
Este viernes, como suele hacer de forma regular el partido de Santiago Abascal, se ha desplazado a una de nuestras localidades para promocionar su partido y captar militantes para la causa.

En este caso ha sido el propio diputado nacional por Huelva y vicesecretario nacional de Organización de Vox, Tomás Fernández, el encargado de encabezar la delegación verde en Chucena, donde han instalado una mesa informativa para atender a todos aquellos interesados en el ideario de la formación de derechas. Esto, que no dejaría de ser anecdótico, hay un municipio onubense que ha decidido convertirlo en noticia, al denegar una vez más la instalación de esta mesa informativa. Nos referimos a Moguer, que amparándose en las restricciones de la pandemia, prohibe a este partido ejercer un derecho fundamental como es el de reunión, reconocido en el artículo 21 de la Constitución. Ocurrió el pasado 29 de mayo, aunque también sucedió lo mismo el 20 de abril. El caso es que el Consistorio sí permite otro tipo de actos que implican la concentración de personas, por lo que se puede deducir que estamos ante una conducta arbitraria por parte de equipo de gobierno socialista. Arbitraria por que es una conducta sólo sujeta a la voluntad del alcalde; y podríamos añadir que un poco torpe, por cuanto vetar a una opción política en el municipio no hará que desaparezcan del pueblo quienes simpatizan con sus postulados. Más al contrario, muchos moguereños afectos a la formación de Abascal verán de este modo reafirmado el mensaje de Vox, que basa buena parte de su popularidad en asumir, incluso con orgullo, el ser atacado por los partidos tradicionales. Y parece haber encontrado en el edil moguereño el colaborador ideal.


Ahora se llevan las despedidas 'a la francesa' en el Recre. ¿Qué fue de la educación y del señorío? Ahora parece que al menos en el Recre esos calificativos han sido sustituidos por otros como la desidia y el orgullo herido. Y es que una vez que pocas semanas antes de la irrupción en nuestras vidas del Covid-19 se despidió en la sala de prensa del Nuevo Colombino de la afición y de la prensa Alberto Monteagudo tras ser destituido, los siguientes entrenadores que ha tenido el Decano han preferido marcharse sin hacer ruido. O más bien a la francesa, como demostrando que esto tampoco les había importado tanto. Es un feo desplante principalmente para todos los seguidores que tiene el conjunto onubense y que demuestra el talante de cada persona. Claudio Barragán fue cesado y nada se supo de él desde ese mismo día a nivel público. Y lo mismo ocurrió con Antonio Calle y con Carlos Pouso. Ni una rueda de prensa, ni una nota informativa, ni un mensaje en las redes sociales... Y luego está el tremendo caso de Juan Antonio Zamora, secretario técnico albiazul durante las dos últimas temporadas. Un hombre al que el Recre reclutó en su día como futbolista cuando se encontraba sin equipo en el año 2012 tras haber estado entrenando unos días antes con el de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE). Un hombre al que el Recre le respetó siempre su contrato como jugador pese a sus graves y continuas lesiones. Un hombre que después entró a trabajar en el organigrama del fútbol base del club decano habiendo gente en Huelva preparada tanto o más que él. Un secretario técnico que debería pedir perdón por ser uno de los principales responsables de que el club albiazul vaya a militar por primera vez en su historia en la quinta categoría del fútbol nacional. Y sin embargo no ha querido despedirse públicamente de la ciudad ni del recreativismo. En fin, una pena. Y lo peor es que se sientan peligrosos precedentes, aunque afortunadamente todo esto va con la personalidad de cada uno y seguro que en el futuro sí que habrá profesionales del Decano que se despidan del club de una manera más decente.