VOLABA DESDE NICARAGUA
Reencuentro truncado: impiden entrar en el país a la pareja de una cooperante onubense
13.49 h. La pareja de Eva Moro, una cooperante de Moguer, llevaba desde la mañana de este martes retenida en el aeropuerto de Barajas. Aunque venía con la denominada ‘carta de invitación’ para 90 días, no le han dejado entrar a España por no poder acreditar que contaba con recursos económicos suficientes. Venía a estar presente en el nacimiento de la hija que espera junto a la cooperante onubense.

El grito de auxilio desde el aeropuerto de Barajas fue infructuoso, y finalmente la pareja de la cooperante onubense Eva Moro, que tenía previsto pasar aquí tres meses y estar presente en el nacimiento de la hija de ambos, ha sido deportada.
La resolución del Contencioso-Administrativo ha resultado desfavorable, y Alejandro, que llevaba retenido en el aeropuerto de Barajas desde la mañana de este martes, finalmente ha sido devuelto a Nicaragua por no haber podido acreditar debidamente que contaba con recursos económicos suficientes para sufragar su estancia en España, donde tenía previsto pasar el tiempo máximo que permite la ley, 90 días.
Así, según han confirmado a huelva24.com fuentes del entorno de la cooperante, la resolución del juzgado llegó esta misma mañana y la deportación ha sido inmediata, con lo que ni siquiera han permitido que la pareja se viese en el aeropuerto, donde ambos llevaban más de 24 horas.
Pese a contar –o al menos eso creían ellos- con todos los requisitos que permitían la entrada de Alejandro a España y su estancia aquí –certificado de empadronamiento de ella, información de la vivienda donde Alejandro va a residir y una autorización de la propietaria de la misma, formulario oficial cumplimentado y la denominada carta de invitación, documento que hace la Policía Nacional-, el chico fue retenido a su llegada al aeropuerto por no poder acreditar que contaba con recursos económicos suficientes para sufragar su estancia en el país.
Pese a que ella sí cuenta con recursos y pedía poder acreditarlo, “me dicen que al haber realizado ya la entrevista no hay manera de subsanarlo, de ahí que me fuese a recurrir al juzgado”. Sin embargo, el juzgado ha resuelto en contra y el reencuentro finalmente no tendrá lugar.