Permítame que me presente

Siempre es difícil hablar de uno mismo, y mucho más presentarse para tanta gente en tan solo unos párrafos. No soy amante de las formalidades y posiblemente si estuviésemos frente a frente en una terraza al sol de esta preciosa ciudad y con un café encima de la mesa empezaría por contarte quién soy. 

Soy un vividor por naturaleza, y cuando digo vividor significa que hace muchos años que a esa palabra le quité las connotaciones negativas que acarrea. Soy un vividor de la vida valga la redundancia.

Hace 23 años y por esta misma fecha, cuando los sones del carnaval llamaban a la puerta de febrero y aún las camisas de cuadros y colores estaban de moda, mi madre me fue a parir onubense.

Hoy, y con una vida, llena de altibajos, como la de todos, me enorgullece decir que he encontrado mi camino. Cuando me percaté de que un gran coche, una gran casa y una gran tele no era todo lo que quería para mi vida (y mucho menos a costa de sentar frente de mí a un trabajador, padre de cuatro hijos, atarlo a una hipoteca de por vida y desangrarle poco a poco), abandoné la Facultad de Economía. Ahora cuido de la gente que me rodea, y de todos. Estudio el Grado de Enfermería en la Universidad de Huelva, hecho que compagino con las prácticas clínicas en hospitales y centros de salud de la ciudad.

Con gran interés en la política, políticamente independiente y desde un punto de vista personal, aquí os presento esta columna 'Y mientras hablamos...' y en ella cada semana podréis leer como fluctúa la actualidad mientras usted y yo hablamos.

Sin pretender ser el protagonista de esta columna (ya que la actualidad es la única protagonista), espero que me acompañen en este nuevo viaje y que cada semana no me falten a esta cita. En la mesa de aquel bar, al sol de esta maravillosa ciudad y en la cual los dos analizaremos la actualidad mientras hablamos.

@juanmaglez