El Patio de Mikasa, más fuerte que nunca

Parece que fue ayer cuando al gran Antonio Bendala le daba los primeros consejos y las primeras enseñanzas, con el mismo cariño con el que unos padres dan el primer biberón a un recién nacido. A partir de este momento, mi amigo Antonio, al que veo un día sí y otro también, ha conseguido forjar su propio estilo y propia personalidad en un mundo difícil y complicado como es el del periodismo deportivo y la televisión.

Espero que las asociaciones de la prensa de Huelva tomen nota de todo ello y hagan algo más que dar premios y permanecer impasibles ante la sangría que está sufriendo el sector. Por cercanía os puedo decir que la prensa escrita murió, la radio está a punto de hacerlo, se mantienen de aquella manera los digitales y la televisión quizás sea el tuerto en este país de los ciegos.

Me niego absolutamente a decirle aquello de 'gracias por todo' o el 'hasta siempre', porque no ha de sentirse triste por ello. Tiene una niña preciosa, una mujer admirable y una familia y amigos que queremos lo mejor para él. Es por eso que hoy, más que nunca, muere un programa pero se forja una manera de ser, de pensar, de sentir e informar y ésa no es otra que la de 'El patio de Mikasa', el proyecto de mi amigo Antonio que hoy está más vivo que nunca. Un abrazo fenómeno.