el tiempo en huelva
¿Cómo diferenciar en el cielo la calima del Sáhara del hollín de Canadá?
Suben las temperaturas por la tarde y más calor que al mediodía, sobre todo en la zona litoral
En el Sáhara, con temperaturas por encima de los cincuenta grados, se conforma la calima que esta tarde se podrá observar con sólo elevar la vista al cielo de Huelva, que es blanco y azul como el color del vestío que llevas tú, pero quedará velado por una capa grisácea
Hay que distinguir entre calima, polvo sahariano en suspensión y el hollín procedente del humo de los terribles incendios iniciados en mayo en Canadá y aún activos, que circulan entre cinco y siete mil metros por encima de nuestras cabezas
Llega a Huelva la nube de hollín procedente de los incendios que asolan Canadá

Del Sáhara al Canadá por toda la orilla. Entre el polvo del Sáhara que nos trae la masa de aire tropical continental, y el hollín que desde el Canadá nos trae la Corriente de Chorro, Jet Stream para los que sois angloparlantes, hemos tenido unos días muy entretenidos. Pues bien, esto no para aquí, hoy mismo esa misma masa de aire tropical continental, en su caprichoso deambular por el sur peninsular, nos trae una sorpresa para acabar ya definitivamente con la ola de calor que nos ha tenido estos días atrás medio asfixiados. Las temperaturas, esta noche, serán superiores a las del mediodía. Como lo leen.
Esto ocurrirá sobre todo en el litoral, en la capital las temperaturas irán desde los 34º a la una de la tarde a los 38º a las ocho, mientras que en la zona del Andévalo, la Campiña o la Sierra, simplemente el termómetro no bajará en ese periodo de tiempo, sino que incluso aumentará algún grado. Será menos evidente el paso de la masa de aire cálido tropical continental, pero también estará presente.
Es esa masa de aire, formada en el desierto del Sáhara, donde las temperaturas no bajan de los cincuenta grados en todo el día, la que al ascender lleva consigo polvo, sobre todo fosfatos, buenos para el campo, que son los que conforman esa calima que ayer era mucho más evidente que en la mañana de hoy, aunque por la tarde se podrá observar con sólo elevar la vista al cielo de Huelva, que como saben es blanco y azul como el color del vestío que llevas tú, pero que esta tarde estará velado por una capa más bien grisácea, es el polvo del Sáhara. Calima.
Hollín de incendios aún activos
Deberíamos distinguir entre este polvo sahariano en suspensión y el hollín procedente del humo de los terribles incendios aún activos, desde primeros de mayo nada menos, y complicados de atajar en prácticamente todas las provincias canadienses. No deberíamos confundir unos con otros, entre otras cosas porque el aire cargado de hollín de los incendios canadienses, circula en altura, al menos a cinco mil metros y no habrá un descenso brusco del mismo, sino que se irá diluyendo en la atmósfera en su largo caminar. Muy lejos de nuestras narices.


Unos y otros son materia en suspensión. A la calima estamos acostumbrados. Cuando asciende en latitud el aire cálido procedente del norte de África, si se trata de una masa de aire tropical continental, claro, contiene partículas de polvo sahariano, aire sucio podríamos llamarle, e impide ver el cielo limpio, al contrario de cuando domina una situación anticiclónica, que en ese caso tenemos horizontes impolutos que permiten ver a largas distancias. En el caso que nos ocupa, estos días, el anticiclón se sitúa al noroeste de la península, ejerce una situación de bloqueo que impide a las masas de aire frío polar marítimo alcanzar estos sures peninsulares, y al tiempo deja paso franco al aire cálido norteafricano, por lo que continúa el calor, aunque como ya estamos notando y advertíamos en entregas anteriores, a partir de hoy, y ya se notó ayer, tendremos días más frescos.
Sobre Andalucía se sitúa estos días una zona de bajas presiones –véase el mapa de superficie previsto por la Aemet para hoy jueves a las dos de la tarde-, con lo cual el polvo sahariano es lo que produce la calima, el aire cargado de partículas de polvo, y no las partículas que, procedentes de los incendios canadienses, la Corriente de Chorro ha empujado según los flujos dominantes de oeste a este. De hecho, en el norte de la península se ha notado en los atardeceres este polvo en suspensión, y podemos decir que mientras la mitad norte de la península está afectada, aunque no en superficie y ahora lo explicamos, por el humo de los incendios forestales canadienses, en la mitad sur lo que tenemos es bien distinto, polvo sahariano como queda dicho.

El polvo canadiense queda lejos, muy lejos en altura, a miles de metros de altura. Eso sí, también nos ha afectado a nosotros, a la provincia de Huelva, que estamos en la orilla de la zona de bajas, al albedrío de la calima, y en la orilla de la lámina de hollín que a siete mil metros de altura viene circulando desde Canadá, ya que una cola de esa inmensa lámina de hollín se ha desgajado de la principal, y ha entrado precisamente por este golfo de Cádiz en la península. En las fotografías que ofrecemos, se puede ver el atardecer desde la avenida de Alemania, y desde el convento de La Cinta, ambas en la capital onubense y cortesía de Andrés Silván y Lola Gil, con esos colores que nos ha ofrecido el material en suspensión, el hollín, de los incendios canadienses. Amaneceres rojizos y un sol anaranjadado. Un espectáculo efímero. Mañana no creemos que esta cola de la lámina de humo, persista. Se diluirá muy probablemente.
No afecta a las personas
Este humo no nos afecta, ni aquí ni en el norte de España, o en la zona central de la península, debido a que este polvo se extiende en las capas más altas de la troposfera, a más de siete mil metros. Es esta una capa cargada de partículas de hollín, delgada, como una lámina, que se ha desplazado ayudada por la Corriente de Chorro, a la que en numerosas ocasiones tenemos que hacer referencia en esta sección al ser un factor determinante en el clima y en el tiempo meteorológico de todo el hemisferio norte. Este aire cargado con partículas del humo de los incendios no afecta en absoluto a los habitantes de la mitad norte peninsular, ni a nosotros en el suroeste peninsular, concretamente a la zona del golfo de Cadiz, por donde una de las ramificaciones de esta impresionante masa de aire cargada de partículas del humo de los incendios, ha entrado y circulará previsiblemente hasta hoy. En contraposición a la calima, que sí que puede afectar en caso de descender a capas más bajas de las que por ahora circula, en el caso de que se deposite podría afectar a la calidad del aire y a las personas con problemas de asma o cualesquiera otros relacionados con el aparato respiratorio. En todo caso nada grave, podemos respirar tranquilos.
El viernes, como es habitual, veremos qué tiempo tendremos para el fin de semana, pero ya que andamos por aquí, os puedo adelantar que tendremos unas temperaturas veraniegas, pero la mar de agradables. Lo del calor de hoy no lo tomen como una ofensa de los dioses, porque demasiado bien nos estamos portando, sino como una despedida amable de la puñetera masa de aire tropical continental que nos ha cogido de lleno estos días. En fin, mañana más. Abur.