La Guardia Civil le salva la vida a una mujer de 65 años que se encontraba rodeada de sangre y deshidratada tras sufrir un fuerte golpe

Los hechos ocurrieron cuando agentes de la Guardia Civil del puesto de Punta Umbría y los servicios sanitarios, tuvieron conocimiento, a través del 112, de un posible accidente sufrido de una mujer de avanzada edad en el interior de su domicilio.

La patrulla que se encontraba cerca del lugar indicado mientras se dirigía al domicilio intentaba contactar con la víctima por teléfono para comprobar su estado, no lográndolo ya que no contestaba, poniendo a los agentes en alerta ante la posibilidad de que la víctima pudiera haber perdido la conciencia.

Una vez que llegaron al lugar llamaron a la puerta, no abriendo nadie en un principio. Ante la insistencia, uno de los agentes oyó gritos de auxilio de una voz muy débil que provenía de lo que parecía el fondo de la vivienda.

Es por ello que, ante tal situación, la patrulla entró al interior dando un fuerte empujón a la puerta de la vivienda, no oponiendola misma demasiada resistencia ya que tuvieron la fortuna  de que se encontraba encajada. 

Conforme avanzaban por la vivienda dirección a la voz de auxilio, encontraban a su paso restos de sangre por el suelo y por las paredes, hallando a la víctima en una de las habitaciones tumbada en el suelo sobre abundante sangre.

Tras inspeccionarla, observaron un gran traumatismo con una herida muy grave en el tobillo izquierdo que al parecer, se había producido tras intentar la mujer levantarse de la cama, no soportando el hueso el peso y como consecuencia se produjo una fractura de gran gravedad llegando incluso a desgarrarle la piel.

Tras estabilizarla, la víctima fue trasladada en ambulancia al Hospital Juan Ramón Jiménez donde está actualmente ingresada fuera de peligro.